martes, 24 de febrero de 2015

Crítica literaria. Recopilación de artículos, ensayos y reseñas

     
     La crítica literaria es un animal que igual puede ser estudiado como una entidad filosófica o abordado por especialistas en teratología. Su naturaleza múltiple puede producir la vertiginosa sensación de lo inabarcable o de lo incomprensible. Como en cualquier disciplina intelectual, los marcos teóricos que la han nutrido han sido de lo más diverso. Pero, más allá de la disparidad de escuelas y marcos teóricos, lo que produce desazón y desconcierto es, me atrevo a enfatizar, la variedad de formatos y medios que la modulan, y la cuestión ética que le es intrínseca. La proliferación de canales por los que circula la información en la actualidad determina distintos modos de aproximación. Ominoso -y causa de consternación- se hace a quien esto escribe el tener que resaltar obviedades. Un ensayo para una revista especializada posee unos condicionantes y requerimientos harto disímiles de los de una reseña en un periódico o una revista literaria. La dependencia no es es solo respecto de las características instrumentales o tecnológicas del canal, sino también de los usuarios finales que leerán dicho texto. Si me detengo en ello es porque no falta quien pretende que toda crítica literaria debe reducirse al género menor por antonomasia: la reseña. Y hacer de ella un dechado de virtudes simplificadoras.

martes, 10 de febrero de 2015

Ruido o luz

Ruido o luz
Ruido o luz. Ernesto Suárez, Daniel Bellón y Carlos Bruno. Amargord Ediciones. 


     Lo primero que quisiera resaltar de este poemario, Ruido o luz, es su generación como obra colectiva o, si se prefiere, de autor colectivo. En efecto, se trata de la particular conjunción creativa de Ernesto Suárez, Daniel Bellón y Carlos Bruno. Tres poetas que portan, a sus espaldas, una trayectoria específica y que se han vinculado en varias ocasiones para realizar proyectos como el de Cartonera Island, la revista La casa transparente o las ediciones de La calle de la costa. Lo interesante es, pues, que hayan decidido abolir su autoría individual para favorecer una creatividad del hallazgo común. En nuestras sociedades del hiperindividualismo -donde la conciencia narcisista ha sustituido a la conciencia política, para decirlo con palabras del filósofo Gilles Lipovetsky-, en las que la nutrición del ego está a la orden del día, una obra colectiva trabada a ratos por la amistad, las alianzas fortuitas o premeditadas, implica una crítica y un rescate. El de la idea del arte como fenómeno compartido.

lunes, 10 de noviembre de 2014

José Carlos Cataño o la unidad de una respiración cambiante

José Carlos Cataño o la unidad de la respiración cambiante
Artículo en el suplemento El Perseguidor de Diario de Avisos

     La obra de José Carlos Cataño (La Laguna, 1954) abarca prácticamente todos los géneros literarios, aunque la vertiente poética sea la principal y actúe como unificadora del conjunto. Su poesía reunida desde 1975 a 2005 figura en el volumen El amor lejano (que incluye los siguientes libros: Disparos en el paraíso, Muerte sin ahí, El cónsul de Mar del Norte, A las islas vacías y Para enterrar a los muertos en las palabras). Con posterioridad ha editado el poemario Lugares que fueron tu rostro. Además, su escritura conoce tanto el ensayo (deliciosa recopilación es Aurora y exilio), como la novela (De tu boca a los cielos y Madame) y los diarios, cuya primera parte nos ha ofrecido en Los que cruzan el mar.

martes, 22 de julio de 2014

El primer presagio de Miguel Ángel Serrano

Un presagio - Miguel Ángel Serrano
Un presagio - Miguel Ángel Serrano
Un presagio. Miguel Ángel Serrano. Bartleby Editores.
Publicado originalmente en Culturamas.


El escritor Miguel Ángel Serrano (1965), autor de las novelas Tango, Jardín de espino y El hombre de bronce, acaba de publicar su primer poemario bajo el sello Bartleby. Enfrentarse con un primer volumen de poemas suele entrañar la difícil situación de abordar la lectura de inmaduras composiciones. Semejante perspectiva no se cumple en Un presagio. Ciertamente, la voz de Miguel Ángel Serrano se nos muestra aquí forjada en metálico resonar. Sustancia, la de sus versos, no volátil, sino hiriente conciencia.

martes, 15 de julio de 2014

Un licencioso obispo fetasiano: Conversaciones con Rafael Arozarena, de Roberto García de Mesa



Conversaciones con Rafael Arozarena
Conversaciones con Rafael Arozarena

En octubre de 1998, Roberto García de Mesa realizó una larga entrevista a Rafael Arozarena que, por razones de espacio, se publicó muy recortada en el periódico El Día. A los pocos meses, Roberto decidió que aquel trabajo podía prolongarse en un libro entero. El resultado se publicó en 2004 y ostenta por título Conversaciones con Rafael Arozarena. El proyecto, que abarcó unas catorce horas de grabación, figura dividido en 19 capítulos. A continuación enumeraremos sucintamente algunos temas relevantes tratados en este opúsculo.

jueves, 3 de julio de 2014

Sobre la poética de Miguel Ángel Curiel

La revista Fogal recoge en su primer número mi breve ensayo sobre la poesía de Miguel Ángel Curiel, una de las voces más singulares e interesantes del actual panorama poético español. Comentamos en él diversos aspectos que, entreverados, revelan la potencia de una palabra poética que nos remite a las nociones de sacralidad, misterio y conocimiento. Pueden leerlo haciendo click sobre el enlace (y, de paso, naveguen por el resto de secciones de la revista donde encontrarán un buen puñado de textos creativos y críticos de distinta naturaleza):

- Palabras de abismo. Sacralidad, misterio y conocimiento en la poética de Miguel Ángel Curiel.


Miguel Ángel Curiel
Miguel Ángel Curiel

martes, 17 de junio de 2014

La mala hierba de Lu Xun

La mala hierba. Lu Xun. Bartleby Editores. Traducción de Blas Piñero Martínez.

La actividad creativa de Lu Xun (1881-1936) se desarrolló en el primer tercio del siglo XX, en la China de la república sometida al dominio parcelado de los llamados señores de la guerra. Aparte de La mala hierba, concebido entre 1924 y 1926, y publicado por esos mismos años en revista antes de ser compilado en libro y editado en 1927, sobresalen en su producción la escritura de Diario de un loco (1918) y La verdadera historia de AQ (1921), ambas obras vertidas al castellano.

La mala hierba - Lu Xun
La mala hierba - Lu Xun

martes, 3 de junio de 2014

Microcosmos de la tensión

El ángel Esmeralda - Don DeLillo
El Ángel esmeralda - Don DeLillo
El ángel Esmeralda. Don DeLillo. Editorial Seix Barral. Traductor: Ramón Buenaventura.
Publicado originalmente en Culturamas.


Si recordamos el célebre aserto cortazariano según el cual el cuento se asemejaría a la fotografía y la novela a una película, pudiera entenderse que la única posibilidad del relato sería, entonces, la del fogonazo, la pura concentración. El desarrollo de la existencia, con sus altibajos y sus accidentes geográficos, le estarían vedados al cuento, siendo su seno natural la novela. Cabría recordar cuán a menudo las hipótesis creativas de los autores sólo sirven como pretexto explicativo de la obra propia y que, gracias a la propia dinámica evolutiva de la cultura y de los grupos humanos, todo aserto sintético adquiere estatuto de virtualidad, superándose o siendo negado por los propios hechos culturales. Así, verbigracia, El ángel Esmeralda, conjunto de relatos del novelista norteamericano Don DeLillo, coincide parcialmente con la máxima cortazariana: el relato es fogonazo, sí, pero también transcurso, dilatación, vívida recolección apretada y/o secuencial de existencias anónimas. El poderoso ejercicio narrativo que DeLillo despliega en estas nueve narraciones nos brinda microcosmos fascinantes.

En los nueve relatos que componen este volumen, DeLillo genera unos personajes que se ven enfrentados a situaciones límites. Narraciones tensas en las que la textura del propio relato se amolda a las emociones que experimentan los personajes. El escritor norteamericano modula y dosifica sabiamente el ritmo narrativo: cada cuento, aun el de factura aparentemente más insulsa, simula un artefacto de relojería. Los relatos configuran mundos narrativos con sus desajustes y antinomias, potenciados por la gran capacidad descriptiva de DeLillo.

En algunos cuentos el autor va reconstruyendo la vida de los sujetos mediante fragmentos descriptivos de detalles que comportan una gran carga de significación. Un recurso interesante es la utilización peculiar que hace de las enumeraciones en algunos párrafos, así como los ocasionales guiños irónicos, la aparición de segmentos esencialmente reflexivos, hipálages asombrosas o el absurdo de algunas situaciones. Por ejemplo, en el relato que da título al libro, centrado en los personajes de dos monjas y una pequeña que vive en los bajos fondos del Bronx, tras dibujar ciertos aspectos ominosos de la vida de los habitantes de dicho barrio, vemos cómo arriba a la zona un autobús con turistas europeos portando sus cámaras fotográficas para rescatar quizás lo pintoresco de la miseria; el autobús ostenta un letrero con la inscripción “Sur del Bronx surrealista”. Una de las monjas, ante semejante espectáculo, les increpa arguyendo que aquello no es surrealista, sino realidad pura. Que lo surrealista es la presencia de aquellos turistas allí. El absurdo, pues, como acto representacional y, también, como conciencia súbita de los dobleces que la realidad esconde, la coexistencia de contrarios que no se anulan. El relato, tras la crudeza de lo que nos narra, finaliza con la síntesis mediática de una fe menor, la fabricación casera de un mito.

Pasemos a comentar brevemente algunos aspectos de estos cuentos. En Medianoche en Dostoievski ocurren hechos hilvanados por la mera sucesión de los personajes, el espacio y el tiempo. La historia parece un juego detectivesco basado en la invención (un juego espejeante de intriga ficcional dentro de la propia ficción), por parte de dos estudiantes, de la vida de un sujeto al que siguen. En relatos como Creación o El corredor se nos habla de las debilidades humanas; así, en Creación asistimos a la angustia por la imposibilidad de salir del paraíso tropical elegido por vacaciones y a una sorprendente infidelidad (en cierto sentido, este texto exhibe ciertas reminiscencias de Los cautivos de Longjumeau, de Léon Bloy, que tanto agradaba a Borges y que éste veía como precursor de Kafka). Atento a los conflictos de actualidad, La hoz y el martillo explora el aislamiento penitenciario y la crisis económica, así como la adicción tecnológica y el hiperconsumo de información (uno de los recursos más interesantes es la conexión entre dos niveles narrativos: dos niñas se comunican con el personaje principal a través de mensajes secretos que envían por televisión, en un programa de información bursátil). Acaso la mejor pieza del volumen sea Momentos humanos de la Tercera Guerra Mundial: por su ambición, por la alianza entre ese futuro presentido con recelo y la presencia obsesiva de dos personajes distintos en un ambiente estrecho y aislado, por sus fobias y ese toque mágico de unas voces que dos astronautas reciben desde el pasado. A su vez, el miedo es manifiestamente una de las emociones más exploradas; en La acróbata de marfil se produce el redimensionamiento de un miedo real por un terremoto, convirtiéndose en una paranoia permanente por la posibilidad de su repetición; y en Baader-Meinhof, otro de los cuentos imprescindibles de esta compilación, el narrador comienza con una écfrasis que conjuga una exposición artística y la reflexión sobre el objeto de dicha exposición: los últimos instantes de la vida de los componentes de la Fracción del Ejército Rojo; a la mitad del relato, un vuelco narrativo evidencia cómo una pesadilla puede concretarse entre las sombras de la rutina y su supuesta seguridad.

En El ángel Esmeralda DeLillo crea núcleos primordiales de narración, casi como si se tratara de huevos cósmicos o átomos primigenios que se desarrollan dando lugar a microuniversos habitados por criaturas, espacios y acciones singulares. Y, a partir de esos núcleos, explora una amplitud de posibilidades de sumo interés, donde la tensión cruza, a modo de mediatriz, la línea imaginaria que conforma cada texto.

martes, 27 de mayo de 2014

Sobre Rising Sun de Miguel Ángel Galindo

La revista mexicana Círculo de Poesía ha publicado mi breve ensayo sobre el último poemario de Miguel Ángel Galindo: Rising Sun (2013). Pueden leerlo aquí:

Sobre Rising Sun: las constelaciones de un Rabdomante


Rising Sun - Miguel Ángel Galindo
Rising Sun - Miguel Ángel Galindo

martes, 20 de mayo de 2014

Los signos del asombro


Sobre abierto. Rafael Cadenas. Editorial Pre-textos. 76 páginas.

Sobre abierto - Rafael Cadenas
Sobre abierto - Rafael Cadenas
Si toda misiva porta un mensaje cifrado, la apertura de un sobre sería una invitación a recorrer esa carta, a comprender esos trazos que llamean desde la página y que, acaso, nos iluminen con sus ignotas revelaciones. En Sobre abierto, el último poemario del venezolano Rafael Cadenas, el poema se brinda como repentina fulguración, en una transparencia sin lacre: al sujeto poético le son desvelados ciertos aspectos de la realidad en un tono ora de celebración, ora nostálgico, pero siempre instante encendido del pensamiento y la sensación.

Encontramos un goce luminoso frente a ciertos prodigios cotidianos: el vuelo de un pájaro, la sombra que proyectan unas nubes, el arbusto que brota de una piedra, la maravilla que aguarda en un rayo de luz solar que se filtra en el apartamento o en un charco de agua en donde se engendra el arcoíris. Estos descubrimientos repentinos motivados por señales aparentemente insignificantes comportan  una vindicación de la sorpresa o el asombro: cualquier ente puede ser absorbido por el poema; la experiencia poética puede aguardar en lo más nimio. Escribe el autor: "No desdeñes nada. / Una rana le dio a Basho / su mejor poema".

Cadenas erige una poética centrada en la maravilla del ser, en un ansia de habitar el presente para escapar de la marea insaciable del tiempo y el yo. A propósito de esta recepción afirmativa del mundo es elocuente la coincidencia –o reiteración- entre unos versos de Sobre abierto y otros de la novena elegía duinesa de Rilke: estar aquí es demasiado, la mera existencia es un hecho abundante, opimo.  En esta primera vertiente de algunos de los poemas observamos una radical conexión con ciertas formas del pensamiento poético oriental, especialmente el japonés, y con la tradición clásica de dicha literatura, indagatoria de una revelación o acceso al ser a través de breves resplandecimientos (al mismo tiempo que se observa su interés por las diversas formas del pensamiento místico). De hecho, coquetea con la esencialidad del haikú (no con su métrica exacta) en algunos poemas breves que agrupa en series como Trípticos.

La segunda de las vertientes temáticas sobre la que incide el autor en este poemario es la memoria y la paradójica configuración de la misma. La memoria acusa esta dualidad contradictoria: si bien es el asiento que posibilita nuestra identidad, su edificación, también supone cautividad, un límite para la apertura del ser y su acción. Cercados por esta falaz y sutil representación del yo y su pasado, Cadenas pondera la lucidez que comporta cierto grado de desengaño o escepticismo. En efecto, dice en un poema: "Recuerdo los días / en que yo era entero / mas a un precio alto: vivir / ahormado // La manumisión / es obra del desengaño, el / más refulgente / de los diamantes". Asimismo, en el poema La búsqueda, y en cierto tono narrativo similar a los poemas meditativos de Cavafis, se afirma la ineludible necesidad de las historias, de la ficción, pues "¿qué sería nuestro vivir / sin ellas?". Indigencia de la ficción, de los relatos no verídicos en que se asienta nuestra esperanza; opacidad, en definitiva, de una mitología, el Grial simbólico del título de otro poema, que colma una aspiración que los años van agrietando y de donde emergerá, como mácula o filo, la audacia de la duda. Imposible no evocar, en este sentido, un aforismo del poeta norteamericano Wallace Stevens en el que decía que "La creencia final es creer en una ficción, la cual sabemos que es ficción, y que no hay nada más. La verdad exquisita es saber que es una ficción y que creemos en ella de manera voluntaria".

En cuanto al lenguaje, destaca la transparencia del mismo, muy depurado, con preponderancia de la instantaneidad y un alto grado de condensación. Hay también un ritmo pausado que gira alrededor de un esencialismo verbal. Sin embargo, en algunos poemas, la transparencia deslíe la expresión hasta un grado de adelgazamiento conceptual y formal excesivo. Cabría apostillar que una cierta charlatanería de lo simple o despojado suele confundir la diafanidad expresiva con la anorexia crónica, en cuyo caso el poema, más que fulgurar, desaparece de la página por caquexia, con un gesto lacónico. Esta peligrosa ofuscación acosa algunos poemas de Sobre abierto.

No pocos poemas, finalmente, abordan la propia poética del autor. En Idioma, describe esta tendencia hacia la voz baja, sin estridencia, la enunciación de un cuasi-susurro: "Rehúyes el énfasis, / bajas la voz, / te acercas". El buceo en el lenguaje implicaría el encuentro de las palabras justas, evitando toda impertinente exclamación, silenciando los ruidos y las interferencias, para crear ese espacio mental propicio al advenimiento. Búsqueda del silencio, también, para escuchar al lenguaje del cuerpo, zafándose de los dictados de la tiranía de la propia lengua. Y es que Cadenas  comprende que la relación con la escritura apunta a un más allá de la materialidad del vocablo, un más allá del signo implícito en el signo mismo: en definitiva, la inmanencia. Porque "El origen / es siempre ahora", y el signo se consuma en ese presente perpetuo en el que habita un latir del asombro que entraña la existencia, oculto o apenas insinuado como acontecimiento entre las rutinas del día.