Hola, amigos y amigas.
Escribo esta entrada a manera de despedida de este espacio, Impresiones desde Utopos, que he ido alimentando durante algunos años con reseñas varias. Pero es una despedida y, al mismo tiempo, una bienvenida a mi nueva casa virtual, a la que podrán acceder en la siguiente dirección web:
danielbernalsuarez.com
Así que, si quieren seguir leyéndome, en la nueva web podrán acceder a todo tipo de información relacionada con mis actividades literarias, así como los cursos y talleres que imparto, y también daré cabida a reseñas sobre libros, breves ensayos, etc.
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Nos vemos.
¡Saludos!
viernes, 26 de julio de 2019
jueves, 3 de noviembre de 2016
El Breviario negro de Ángel Olgoso
Recoge Ángel Olgoso en este Breviario negro 41 piezas de artesanía lunar. Relatos brevísimos, alguno de los cuales podría considerarse incluso microrrelato, pero cuya duración narrativa propende al infinito. Hemos de asumir que extensión y duración narrativa no son, en efecto, equivalentes. La brevedad de estas piezas se ve sobrepasada por la dimensión de exceso verbal que las circunda. No hablamos solo de la riqueza léxica desplegada por el autor, algo a valorar en época de anemia estilística como la nuestra, sino de todo acto de manipulación del lenguaje: desde la elección de los vocablos al fraseo rítmico, desde las imágenes súbitas a los paralelismos, desde el demorado regusto en las enumeraciones hasta los convólvulos de las oraciones compuestas. Todo coadyuva a generar una sobreabundancia verbal que atrae la atención sobre la propia materia y hechura expresiva de los relatos. Así, pues, el tiempo empleado en leerlos reverbera en la mente y se duplica la intensidad emotiva asociada a la experiencia de lectura.
lunes, 17 de octubre de 2016
Pobreza, de Víktor Gómez
«Un poema político no tiene por qué ser transparente»
Enrique Falcón, Las prácticas literarias del conflicto
¿Para qué poetas en tiempos sombríos?, inquiría en un célebre verso el poeta alemán Hölderlin [1]. ¿Para qué poesía -o más precisamente: qué poesía- en tiempos de miseria? Desde hace algunos años, en España se ha manifestado una corriente plural de poetas que hacen de la miseria, del tiempo sombrío, el centro y eje de sus poéticas. Múltiples etiquetas se han esgrimido para aglutinarles, pero cierto es que sus prácticas lingüísticas, sus posicionamientos frente a la materia de aquello con lo que trabajan, la palabra, evidencia una disparidad considerable de criterios y abordajes.
La poesía de Víktor Gómez no es ajena, en modo alguno, a estas formulaciones, por cuanto se ha desarrollado en una vinculación constante con los márgenes, en toda la dimensión simbólica y social del término. Nacido en Madrid en 1967, es un reconocido activista cultural en Valencia, desde donde coordina la Asociación Poética Caudal, ciclos de lecturas varios que irradian desde la Librería Primado, y codirige, junto a Javier Gil, la colección ONCE de poesía y ensayo en la editorial Amargord. Ha publicado hasta ahora los siguientes poemarios: Detrás de la casa en ruinas (2010), Huérfanos aún (2010), Incompleto (2010), Trazas del calígrafo zurdo (2013) y Pobreza (2013). De este último volumen, editado por Calambur, nos ocuparemos a continuación [2].
miércoles, 15 de junio de 2016
Sinfonía de los sentidos en clave de sol
En el último verso de uno de sus poemas, Roberto Juarroz menciona el uso de las "palabras caídas", como si nos advirtiera de que la construcción de su particular lenguaje poético, su estética, se fundara sobre la elección de esas palabras caídas, venidas a menos. ¿Pero caídas de dónde y por qué? Estas palabras provendrían de la expulsión -o exilio sufrido de la lengua- por parte de los grandes discursos, ampulosos, inanes e instrumentalizados (y normalizados por las instancias de poder y los medios).
Trazar una filiación con la poética de Antonio Arroyo Silva es del todo pertinente respecto de estas palabras caídas, pues el mismo Antonio refiere en Sísifo Sol, su nuevo poemario [1], un rechazo de la belleza absoluta, de ese discurso, como decía antes, de una grandilocuencia fatua y ensoberbecida, de una belleza que, si bien en un momento histórico concreto puede representar una búsqueda radical, termina por sucumbir a un proceso evolutivo de desgaste. Y la belleza así, absoluta, rehúye el verbo fundador de una misericordia y un amor concretos por el mundo cercano, por las entidades no de la idea, sino del tacto, del roce, precisamente por su vecindad (así lo comprobamos en el poema liminar del libro La belleza). La hermosura de lo mínimo que respira en las esquinas y crítica, también, del alejamiento que cierta poética de salón -estandarización de un grand style clasicista- esgrime, encerrada en la torre cosificada del lenguaje -según entiende el poeta-, sustrayendo el fondo del ser que puebla la palabra, y quizás ahí la querencia especial de Antonio hacia el Altazor huidobriano y su vertiente femenina, la Asteriza de Astrid Fugellie (aunque esta querencia tenga más relación con la poética -o su aliento- que con la práctica).
martes, 26 de abril de 2016
La libélula o el aleph de Amelia Rosselli
Hace un par de años la editorial Sexto Piso inició una excelente colección de poesía que ha ido consolidándose paso a paso con magníficos títulos. Ediciones de poemarios inéditos en castellano de grandes autoras como Eso o Alfabeto de Inger Christensen o El color del tiempo de Clarisse Nicoidski. Acabo de terminar de releer La libélula, de Amelia Rosselli (con traducción de Esperanza Ortega) y me resulta difícil intentar articular un discurso sobre semejante volumen, sobre todo porque el texto rehúye cualquier fijación, como si su anhelo fuese permanecer en la mudanza, en las formas líquidas.
martes, 26 de enero de 2016
Necesidad de Orfeo de María Teresa de Vega
Acaba de publicarse un nuevo poemario de María Teresa de Vega: Necesidad de Orfeo. Viene a añadirse a su obra como culminación de una trayectoria iniciada con Perdonen que hoy no esté jovial (2001), y continuada en los libros Cerca de lo lejano (2006) y Mar cifrado (2009). Culminación, digo, y maduración, porque si bien Necesidad de Orfeo prolonga ciertas características visibles en sus anteriores entregas, la autora ha sabido construir una pieza armónica, vertebrada en torno al mito de Orfeo, y que fluye con una coherencia interna mayor a la de poemarios precedentes.
lunes, 15 de junio de 2015
Crítica poética de la pintura
De modo paralelo a mi interés por la literatura se desarrolló en mi adolescencia una especial querencia hacia las artes plásticas: enigma irresoluble, la relación que sostenemos con ese puñado de imágenes que altera nuestra consciencia. Percepción de formas, de manchas, de trazos: escritura sin letras, verbo incandescente, ritmo visual. ¿Cómo transformar en palabras, en sucesión de palabras, la intensa experiencia que comportan el descubrimiento de la jovialidad del color en Kandinsky, la irrupción del humor dadaísta, el asombro primigenio e irónico en Arcimboldo o la tenebrosa certidumbre del miedo y la angustia en ciertas obras de El Bosco? Fiel a ese acercamiento proclive a los incautos, en un resquicio de la Revista Fogal procuro acompañar con un artilugio tan imperfecto como una combinación de letras, la exposición de determinadas obras. Desde collages protosurrealistas hasta la abstracción impura, desde lo conceptual hasta el grafiti. Si algo puede signar el arte contemporáneo -para bien y para mal- es la permanente apertura de su propio sentido. Búsqueda incesante que colinda con el abismo y con la pirueta, con el hallazgo y con la trivialidad. De estas multiformes dobleces se nutre, a fin de cuentas, toda (des)dichada vida humana. ¿A qué engañarnos con requerimientos de pureza o esencialismo que son meras construcciones de nuestro cerebro sin asidero en la realidad fenoménica?
martes, 17 de marzo de 2015
Szymborska
Szymborska y la memoria del texto: síntesis, divagación y humor
De
la poeta
polaca Wislawa Szymborska
(1923-2012) se han ido traduciendo al español casi todos sus libros
de poemas
desde 1996, año en el que recibió el premio
Nobel de Literatura
"for
poetry that with ironic precision allows the historical and
biological context to come to light in fragments of human reality",
según dictaminó la Academia Sueca.
En
su discurso de recepción de
dicho galardón, la escritora ubicó como motor de la innovación
creativa, fuera en el ámbito artístico o científico, la
duda.
Algo así como una reivindicación socrática,
más metódica y exenta de las pretensiones del filósofo ateniense.
martes, 24 de febrero de 2015
Crítica literaria. Recopilación de artículos, ensayos y reseñas
La crítica
literaria es un animal que igual puede ser estudiado como una entidad
filosófica o abordado por especialistas en teratología. Su
naturaleza múltiple puede producir la vertiginosa sensación de lo
inabarcable o de lo incomprensible. Como en cualquier disciplina
intelectual, los marcos teóricos que la han nutrido han sido de lo
más diverso. Pero, más
allá de la disparidad
de escuelas y marcos teóricos, lo que produce desazón y
desconcierto es, me atrevo a enfatizar, la variedad de formatos
y medios que la modulan, y la cuestión ética que le es intrínseca.
La proliferación de canales por los que circula la información en
la actualidad determina distintos modos de aproximación. Ominoso -y
causa de consternación- se hace a quien esto escribe el tener que
resaltar obviedades. Un ensayo para una revista especializada posee
unos condicionantes y requerimientos harto disímiles de los de una
reseña en un periódico o una revista literaria. La dependencia no
es es solo respecto de las características instrumentales o
tecnológicas del canal, sino también de los usuarios finales que
leerán dicho texto. Si me detengo en ello es porque no falta quien
pretende que toda crítica literaria debe reducirse al género menor
por antonomasia: la reseña. Y hacer de ella un dechado de virtudes
simplificadoras.
martes, 10 de febrero de 2015
Ruido o luz
Ruido o luz. Ernesto Suárez, Daniel Bellón y Carlos Bruno. Amargord Ediciones. |
Lo
primero que quisiera resaltar de este poemario, Ruido
o luz, es su generación como obra
colectiva o, si se prefiere, de autor colectivo. En efecto, se trata
de la particular conjunción creativa de Ernesto Suárez, Daniel Bellón y Carlos Bruno. Tres poetas que portan,
a sus espaldas, una trayectoria
específica y que se han vinculado en varias ocasiones para realizar
proyectos como el de Cartonera Island,
la revista La casa transparente
o las ediciones de La calle de la costa.
Lo interesante es, pues, que hayan decidido abolir su autoría
individual para favorecer una creatividad del hallazgo común. En
nuestras sociedades del hiperindividualismo -donde
la conciencia narcisista ha sustituido a la conciencia política,
para decirlo con palabras del filósofo Gilles Lipovetsky-,
en las que la nutrición del ego está a la orden del día, una obra
colectiva trabada a ratos por la amistad, las alianzas fortuitas o
premeditadas, implica una crítica y un rescate. El de la idea del
arte como fenómeno compartido.
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